El Rallye 235G es un avión de origen francés, de cuatro plazas, un solo motor de pistón, ala baja tipo cantiléver, tren de triciclo fijo y construcción enteramente metálica. Su diseño le permite toda una gama de utilizaciones que incluyen: avión de entrenamiento de Fuerza Aérea, observación y enlace. Su diseño inicial corrió por cuenta de “Morane Saulnier”, que fue una compañía de aviación francesa dedicada a construcción de aeronaves deportivas y principalmente militares desde 1911 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial (IIGM). Después del conflicto y con la lógica caída en la demanda de aviones de combate, la empresa buscó un nuevo mercado en la aviación general, logrando desarrollar a finales de la década de los 50’s un modelo que rápidamente llenó las expectativas para una aeronave de entrenamiento y turismo: El MS-880 bautizado como “Rallye Club”. El primer prototipo realizó su vuelo inaugural el miércoles 10 de junio de 1959 con una planta motriz “Continental O-200” de 100 HP (Horse Power). A este modelo le siguieron al menos cinco versiones mejoradas y de mayor potencia, que incluyeron el uso de “Slats” automáticos en el borde de ataque de las alas (novedosos dispositivos incorporados en esa época a un avión civil). Tristemente la compañía se declaró en quiebra en noviembre de 1962.
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Ala Cantiléver: Ala sin montantes ni otros componentes externos de soporte desde el fuselaje hasta su extremo, cuya fijación a la estructura del avión se realiza mediante elementos internos.
SLATS: Superficies aerodinámicas en el borde de ataque de las alas de algunos aviones de ala fija que, cuando se despliegan, generan un mayor coeficiente de sustentación, permitiendo que la aeronave vuele a velocidades más lentas o que despegue y aterrice en distancias más cortas. En el caso del Rallye, éstos son automáticos y no requieren acción del piloto.
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En enero de 1963, Morane Saulnier quedó bajo el control de “Potez”, otro fabricante de aeronaves de origen galo y creador del CM-170 Magister; ésta sociedad fue absorbida en mayo de 1965 por “SUD AVIATION”, la compañía estatal de aviación francesa. A principios de 1966, “Sud Aviation” creó una nueva subsidiaria: SOCATA (Society de Contruction de Tourisme et d’Affaires) para continuar con el soporte y la producción de la serie Rallye, así como el desarrollo del modelo S-235 “Grabier”, que realizó su vuelo inicial en abril de 1975. Ésta versión incorporó mejoras estéticas y de sus características STOL (Short Take Off and Landing) gracias al tradicional uso de los Slats automáticos, un motor de alto rendimiento Lycoming O-540 de 235HP y una hélice de paso variable.
Del “Grabier” nació la versión militar: Rallye 235G “Guerrier” (Guerrero), el cual incluyó un tren de aterrizaje reforzado, la sustitución del timón de control por un bastón de mando, instrumentación para realizar vuelos por instrumentos (ADF / CDI) y la capacidad de llevar armamento en cuatro estaciones bajo las alas.
El modelo S-235G representó la cúspide del desarrollo de la serie Rallye, más no el final de su producción. A finales de 1977, SOCATA otorgó la licencia para la fabricación de los diseños de “Morane Saulnier” Rallye (100 – 180) a la fábrica estatal PZL de Polonia, cuyos modelos fueron bautizados PZL 110 “Koliber” (Colibrí) a partir de su vuelo inaugural el 18 de abril de 1978. En total fueron construidos en Francia al menos 3500 aparatos, hasta que el último avión fue entregado en diciembre 1984, asimismo la versión militar fue utilizada en las Fuerzas Aéreas de al menos 10 países africanos, europeos y un americano: El Salvador.
Con un total de 42 años volando con la Fuerza Aérea Salvadoreña (FAS), desde 1979 hasta el día de hoy sábado 1º de mayo de 2021, el Rallye se ha consolidado como una de las aeronaves de entrenamiento básico que se ha utilizado por más tiempo en la formación de nuevos aviadores militares en el país, superado en tiempo únicamente por el Cessna T-41.
Un total de 16 aparatos arribaron nuevos desde Francia entre mayo de 1979 y enero de 1981, utilizaron el registro FAS 50 hasta el FAS 65 y el indicativo “Águila”. Entre los aviones que actualmente se encuentran en línea de vuelo, figura el Rallye FAS 63 (serie 13280), que fue entregado a la FAS el miércoles 04 de junio de 1980 y que sirvió como guía para el armado del modelo Heller a escala 1:50, que se detalla a continuación.
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Heller es una marca francesa de modelos plásticos a escala de aviones, tanques, vehículos y barcos, que funciona desde 1957. Su principal línea de ventas comenzó a incluir muchos tipos de aeronaves que no se podían encontrar en otros lugares, especialmente modelos de diseño francés como los del fabricante Dassault, Potez, Transall y Morane Saulnier / SOCATA.
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La historia de este modelo en particular es un tanto curiosa, arribó al país después de ser adquirida sin armar vía internet en el año 2004, con el aviso de su antiguo propietario de que el canopy (cubierta transparente que cubre la cabina) estaba quebrado. Como suele suceder con los practicantes del aeromodelismo estático, éste kit permaneció guardado alrededor de cuatro años, hasta que su dueño decidió venderlo por falta de tiempo para armarlo. Desde el año 2008 el pequeño avión desarmado permaneció guardado otros 12 años más! Hasta el mes de abril de 2020, fecha en que la cuarentena provocada por la pandemia del virus SARS-CoV-2 concedió el tiempo necesario para su ensamblaje.
El Rallye 235 “Grabier” (versión civil), kit Nº 298 de Heller, salió al mercado en el año de 1976 y actualmente ya está descontinuado, lo que incrementa su valor en el mercado que puede rondar los $60.00 dólares más envío desde los Estados Unidos (Heller anunció en el año 2009 la posibilidad de su relanzamiento). El modelo consta de 47 piezas de plástico inyectado y un set de calcomanías para darle un esquema civil con la matrícula francesa F-BXDT. La conversión a Rallye 235G “Guerrier” (versión militar) necesita una serie de modificaciones que no demandan mucho tiempo, siendo estas:
1. Al interior de la cabina, el reemplazo de los timones de control por dos bastones de mando, el panel de control de armamento y la mira óptica.
2. El retiro de los carenados (botas) del tren de aterrizaje.
Cada entusiasta del modelismo tiene su propia técnica de armado, en este caso lo primero fue liberar las piezas de los bloques, determinar aquellos elementos que necesitarían modificaciones y para darle vistosidad, la incorporación de los “Slats” desplegados (que no vienen en el modelo original de Heller).
Asientos, panel y cabina.
Como referencia se utilizaron imágenes del interior del Rallye FAS 63 tomadas en marzo de 2020 (antes de la cuarentena). El panel de instrumentos fue lijado a fin hacer concordar la disposición de los equipos tal y como estaban funcionando a la fecha; se dejó libre el área utilizada por los switches de control de armamento y no fue necesaria la instalación de la mira óptica, puesto que el sistema fue removido de las aeronaves de la FAS alrededor del año 2003. Los indicadores análogos y radios fueron colocados a partir de calcas sobrantes de diferentes modelos previamente armados. Se elaboraron los bastones de mando con piezas de alambre metálico y se colocaron las palancas de potencia y flaps en el pedestal central.
Los asientos fueron pintados con los colores que se asemejan a la tela utilizada en la tapicería actual, se agregaron los arneses de sujeción para los hombros (equipo de sobrevivencia que no viene en el diseño original) y se pintó el piso y la estructura lateral interna de la cabina con tono “Flat Green”.
La fractura del canopy se unió con pegamento transparente (marca Testors Nº3512) y se le aplicó tinte negro a las burbujas superiores, tal como lo presenta el avión real para reducir el brillo del sol al interior de la cabina.
Posteriormente se realizaron pruebas para el ensamble del fuselaje y alas, antes de aplicar el adhesivo, a fin de asegurarse que las piezas encajaran de manera correcta.
Fuselaje, alas y “slats”.
Se efectuó el rayado de las uniones entre piezas mayores, contornos del fuselaje y estabilizador vertical (que no viene de fábrica), como una manera de facilitar la ambientación de los detalles al momento de aplicar la pintura, asimismo se colocaron los tubos de escape en la parte inferior del motor.
En las alas también fue necesario el rayado adicional a parte de las líneas que vienen de fábrica en los alerones y flaps.
Para los “Slats” se lijó aproximadamente medio milímetro de espesor en los bordes de ataque a fin de que éstos no sobresalgan cuando estén retraídos. Para su elaboración se utilizaron dos pequeñas láminas de aluminio (obtenidas a partir de una lata de refresco) que fueron previamente moldeadas para obtener la curvatura del borde de ataque. Los “Slats” son móviles y están sujetos a la estructura del ala con alambre de cobre.
Tren de aterrizaje.
Como se mencionó anteriormente, los Rallye salvadoreños nunca utilizaron los carenados del tren de aterrizaje. En el caso del patín de nariz, éste fue removido totalmente y como sustituto al montante de la llanta se utilizó parte del tren delantero de un MD-450 “Ouragan” (Heller 1:50) que se encontraba en la huesera de piezas. El trabajo en las piernas del tren principal fue mucho más fácil, solamente fue necesario remover con cuchilla parte del carenado, lijar y enmasillar las cubiertas externas.
El ensamble final.
La unión de la piezas mayores (cabina, alas y fuselaje) se realizó utilizando el pegamento de la marca Testors, solamente en el tren de aterrizaje se utilizó pegamento epóxico, para darle fortaleza a dichas piezas. No se colocó peso extra en el compartimento del motor de manera intencional, por lo que el centro de gravedad del modelo está cargado hacia atrás, provocando que la nariz de la aeronave se eleve, mientras que la cola baja. La razón es simple, se hizo para simular una actitud de nariz arriba en el despegue o aterrizaje que provocara (o explicara) el despliegue de los “Slats”.
Se dejó secar por un lapso de 24 horas para posteriormente iniciar el proceso de enmasillado y lijado (se utilizó masilla de la marca Testors Nº 3511). Una vez con todas las piezas en su posición se inició el proceso de “masking” para evitar ingreso de pintura al interior de la cabina y en las piezas de cristal transparente.
Pintura.
Los Rallye 235G de la FAS han utilizado una variedad de esquemas de pintura que incluyen dos tipos diferentes de camuflado, dos tipos de verde “Dark Green” y “Euro Green” wraparound y en los últimos años algunos tonos de verde muy difícil de determinar (posiblemente “Forest Green” y “Field Green” o una combinación de ambos), con las tradicionales líneas de color naranja para las aeronaves de entrenamiento militar.
Para el caso de Rallye 63, éste portó durante varios años colores civiles (blanco y azul con rayas en dos tonos de azul) cuando prestaba servicios comerciales con el Fondo de Actividades Especiales FAE-FAS. Después una larga meditación, finalmente se decidió aplicar el esquema utilizado a partir de 2014: verde (combinación de “Flat Green” con “Medium Green”) con la panza y el cowling del motor de color negro mate. El trabajo de pintura se efectuó con aerógrafo y cuando la primera capa de pintura verde se secó, se procedió a efectuar el masking para pintar las líneas naranja del fuselaje, alas, estabilizador vertical y “spinner” (cono de la hélice). Posteriormente fue aplicada la ambientación con yeso pastel (negro y café) para finalizar con una delgada capa de barniz brillante, antes de colocar las letras FAS, escarapelas (roundel), número de cola y la marca de nacionalidad (bandera).
Calcas.
Debido a la inexistencia de los números y logos específicos para los Rallye de la FAS, fue necesario elaborar las calcas utilizando “Decal paper” de la marca Testors (Nº 9198) con fondo blanco. Se imprimieron inicialmente en papel bond y gracias al método de “prueba y error” se logró alcanzar las dimensiones deseadas de acuerdo al esquema utilizado en el avión a partir del año 2014. Una vez fueron colocadas las calcas, se dejó nuevamente secar el modelo por aproximadamente 12 horas, para finalmente aplicar la última capa de barniz mate de la marca “Testors” (Nº 1160) y esperar hasta el día siguiente para remover el “masking” y dar por terminado el “nuevo” modelo SOCATA Rallye 235G FAS 63
Parece increíble que transcurrieron más de 40 años después de que éste curioso kit saliera de la fábrica de Heller en Trun, Francia; más de 40 años de permanecer guardado, compartiendo espacio entre libros, revistas, casetes, discos laser y otros modelos a escala hasta finalmente portar los colores y registro de la Fuerza Aérea Salvadoreña, quién sabe cuántos modelos más estarán esperando su turno para ser armados.
Artículo elaborado por Flotilla-Aérea vía Mario A._
Fuentes consultadas:
– Archivos F/A
– Foro Flotilla-Aérea – Consejos para modelistas.
– Guía de armado de Rallye 235G FAS 65 de Marco Lavagnino – Foro de Flotilla-Aérea.
– Guía de armado de Rallye 235G FAS 51 de Levi García – Foro de Flotilla-Aérea.
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