Superstición: “Creencia que no tiene fundamento racional y que consiste en atribuir carácter mágico u oculto a determinados acontecimientos”.
Sería casi imposible enumerar todas las cábalas o supersticiones relacionadas con los diferentes ámbitos de la vida humana existentes en cada país o región. Están aquellas que tienen que ver con acontecimientos importantes para las personas: nacimiento, matrimonio, muerte, festividades, viajes, etcétera; y están las relacionadas con los oficios y profesiones: teatro, agricultura, medicina, entre otras.
Para el caso específico, la aviación no es ajena a este tipo de peculiares creencias (Te invitamos a leer: https://flotilla-aerea.com/2019/10/31/historias-y-misterios/), la mayoría de las cuales tienen su origen a principios del siglo XX, cuando el desarrollo de los vuelos en aparatos más pesados que el aire empezó a crecer. Con el pasar de los años también se adoptaron y adaptaron al ambiente aeronáutico, costumbres y tradiciones procedentes de otras disciplinas, que a la fecha aún se mantienen vigentes.
Fotografías antes del vuelo.
As de la aviación: Todo aviador militar que tiene acreditado el derribo de cinco o más aeronaves enemigas.
Entre los ases de la aviación de la Primera Guerra Mundial (IGM), la superstición más importante era: no ser fotografiado antes de una misión de combate, porque los pilotos solamente registraban las victorias a su retorno. El Barón Manfred Von Richthofen, aristócrata aviador alemán apodado “El Barón Rojo” y máximo as de toda la historia, tentó a la suerte y voló hacia la catástrofe. Compañeros y adversarios lo consideraban invencible por causar tantos estragos a los aviones enemigos: 80 derribos confirmados. Sólo alguien como él podía saltarse la costumbre… y lo hizo. En la mañana del 21 de abril de 1918, antes de abordar el triplano Fokker Dr.I, se puso a juguetear con su perro; mientras tanto un visitante del campo de aviación apuntó el objetivo de su cámara hacia aquella imagen del aviador. Lamentablemente para el Barón Rojo la superstición se cumplió, ni siquiera él pudo burlarla.
Los amuletos.
Amuleto: cualquier objeto portátil al que de manera inexplicable se le atribuye alguna virtud sobrenatural como atraer la buena suerte o asegurar la protección de su dueño.
Durante la IGM la esperanza de vida de un piloto era de tan solo tres semanas, por tanto los jóvenes aviadores buscaban la manera de “protegerse” con talismanes, figuras u otro tipo de artificios que favorecieran su suerte en el campo de batalla, creando así otra de las primeras supersticiones en aviación. Para los pilotos, en especial pilotos militares, los amuletos suelen ser: gemas o piedras, estatuillas, medallas, monedas, imágenes, estampas, colgantes, anillos, etc. En general algún artículo que guarde cierto valor para su propietario y que siempre lo acompaña en todos sus vuelos. Advertencia: la mayoría de pilotos va a negar la tenencia de un amuleto.
Nose art.
Nose Art: Imagen con diseño decorativo generalmente pintada en el fuselaje o parte frontal de una aeronave.
Algunos elementos que actúan como amuletos directamente en las aeronaves son los “nose art”; esta práctica fue adoptada de la antigua tradición naval en la cultura fenicia que consideraba que los ojos (ojos de Horus), situados en ambos lados de la proa de una embarcación, servían para asustar a los monstruos marinos y piratas que asolaban el Mediterráneo.
Al ser adaptada a la aviación, la costumbre de pintar solamente los ojos fue modificada y la proa de las aeronaves comenzaron a ser decoradas con figuras (a veces muy elaboradas) cuya función era personalizar el aparato, servir de identificación y conjurar contra las balas y proyectiles enemigos, actividad que tomó mayor auge en la Segunda Guerra Mundial (IIGM). La Fuerza Aérea Salvadoreña (FAS) ha tenido a lo largo de su historia muchos ejemplos de “nose art” pintados en sus aeroanves desde la década de los 60’s. Durante el conflicto armado (1980 – 1992) fue una práctica bastante utilizada en los helicópteros UH-1.
Kamikaze.
Kamikaze: Viento divino en japonés, es el término utilizado para referirse a los ataques suicidas de pilotos de la Armada Imperial Japonesa durante la IIGM.
Antes de partir en su último vuelo, los pilotos kamikaze participaban en una ceremonia de despedida frente a los hangares en sus bases aéreas o dentro de sus portaviones; en una larga mesa cubierta con un mantel blanco había comida para ser servida en honor de la última misión con el propósito de desearles buena suerte. Los pilotos aparecían vistiendo sus gabachas de vuelo, en cuya parte trasera se había dibujado una pequeña bandera nacional, alrededor de los cuellos vestían pañuelos blancos de seda y algunos los anudaban sobre su frente o casco de vuelo, otros llevaban ramilletes de flores de cerezo o pequeños muñecos u otras mascotas colgando de sus arneses.
Gremlins.
Un Gremlin es una criatura mitológica de naturaleza traviesa y malévola que se alimenta de sellos postales y que habitan en las nubes, lugares donde hay herramientas y que inclusive que vive uno en cada hogar. Surgieron como una popular tradición en Inglaterra a finales de la IGM, cuando se les culpaba con humor de todas las fallas técnicas en los aviones. No se refiere a la película estadounidense de comedia-terror de 1984.
La historia describe a los Gremlins como seres capaces de sabotear todo tipo de maquinaria, incluyendo aeronaves. Razón por la cual, los pilotos ingleses de la Royal Air Force (RAF) durante la IIGM, empezaron a atribuir los incidentes y accidentes frecuentes que sucedían durante sus vuelos a la acción de estos seres fantásticos. Su sola existencia podía explicar las caídas de aviones, sin necesidad de que fuesen atacados.
Tanto la mejora en los sistemas de navegación y control de vuelo, junto al desarrollo de los programas de Seguridad Aérea y Prevención de Accidentes después de la guerra, permitió esclarecer y prevenir muchos incidentes y accidentes de aviación, aunque por el momento, nadie se atreve a negar la existencia de estos seres…
Repetición de números de cola.
Muchas Fuerzas Aéreas y aerolíneas, no vuelven a utilizan el registro (número de cola o número de vuelo) de aeronaves que hayan sufrido un accidente aéreo, ya sea por la creencia de las tripulaciones de que el mismo número puede atraer mala suerte o como una estrategia comercial para no relacionar un nuevo vuelo con el accidente.
Este no es el caso de la aviación civil en nuestro país ni de la FAS, puesto que tienen una costumbre de años para asignar los mismos número de cola de aeronaves que hay sufrido un accidente aéreo, muchas veces con víctimas que lamentar. Solo dos ejemplos, de tantos que hay, se muestran a continuación:
Matrícula YS-14C.
PA-31-310 Turbo Navajo B (c/n 31-7300940) accidentado en Tegucigalpa 16DIC1998.
LET L-410UVP-E (c/n 861716) de Atlantic Airlines matriculado YS-14C a finales de 1998.
Registro FAS 70.
Cessna 182 (c/n 33714) accidentado en el embalse de la presa 05 de noviembre, el 05FEB1959.
T-35B (c/n 108) accidentado en Armenia, Sonsonate, el 19ENE2000.
T-35S/A (c/n 235) recibido por la FAS el 26FEB2005 (en línea de vuelo).
Número 13.
Triscaidecafobia: Superstición que consiste en un miedo irracional al número 13 y que por asociación, puede desarrollar una fobia al viernes y martes 13.
Muchos operadores eliminan el número trece, tanto en el registro de una aeronave, como en el número de vuelo e inclusive en las filas de asientos, esta práctica se realiza en la mayoría de casos para evitar molestias con los usuarios que padezcan de Triscaidecafobia. Nuevamente, este no ha sido el caso de la aviación civil y Fuerza Aérea en nuestro país:
YS-13.
En 1941, antes que los dígitos de las matriculas YS fueran precedidas por una letra (A, C, P o N) fue registrado un Piper J-5B Cruiser (c/n 5-1278) al que se le asignó la matrícula YS-13.
FAS 13.
Solamente una aeronave ha portado el registro FAS 13: Aerospatiale SA315B II Lama (c/n 2455), aparato que voló alrededor de cuatro años con los colores de la FAS, hasta sufrir un accidente en abril de 1980.
Caso totalmente diferente se presenta en la flota Airbus de Avianca (y la antigua flota de TACA) en donde la numeración de las filas de asientos se pasa del 12 al 14, como un estándar en todas sus aeronaves. Para el caso de algunas aerolíneas europeas, también eliminan la línea 17 en sus asientos, al ser considerado un número de mala suerte en Italia.
Fotografías tocando la hélice.
Es un hecho conocido que todo piloto o piloto estudiante se toma una que otra fotografía a la par de la aeronave que vuela. De ahí que el origen de esta superstición, de momento incierto, se puede datar en la época que aún no existían los motores jet. Fue transmitida directamente hace varios años por el Tcnel. PA José Roberto Corleto “Águila” (QEPD), advirtiendo la “mala suerte” que acompaña al individuo que posa intencionalmente para tomarse una fotografía tocando la hélice; no así, si la foto es incidental y la intención del piloto es preparar la aeronave para el vuelo.
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Existen muchas más creencias, tradiciones y costumbres relacionadas a la aviación en el resto del mundo (Te puede interesar: https://mundo.sputniknews.com/orientemedio/201510211052742537-fotos-vuelo-rituales-pilotos-rusos-siria/), que al final terminan formando parte de la mística cultural de los aviadores. Tal como se mencionó al principio, consideramos que todas estas supersticiones carecen de fundamento racional, principalmente si el tema de los incidentes y accidentes es abordado de manera objetiva, con base científica y no sobrenatural… Pero por si acaso, no está de más tener una herradura en la oficina y tampoco dejar la medallita de San Judas Tadeo en tierra._
Artículo elaborado por Flotilla-aérea vía B7.
Actualización 1: 09NOV2020.
Fuentes consultadas:
– Archivos F/A
– SURVIVAL OF THE USE OF OCULI IN MODERN BOATS – James Hornell / Anthropological Institute of Great Britain and Ireland, vol. 53, London.
– SOLDIER OF FORTUNE MAGAZINE, Volume 7, No. 10, October 1982.